"A mi juicio, el destino de la especie humana será decidido por la circunstancia de si el desarrollo cultural logrará hacer frente a las perturbaciones de la vida colectiva emanadas de la pulsión de agresión y de auto destrucción. (...) Sólo nos queda esperar que la otra de ambas potencias celestes, el eterno Eros, despliegue sus fuerzas para vencer en la lucha con su no menos inmortal adversario. Mas, ¿quién podría augurar el desenlace final? Freud, Malestar en la Cultura
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20090419

SEMINARIO I, CLASE 12:COMO FREUD VA CREANDO SU MÉTODO


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David del Real: Cara con pelo azul






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CLASE 14/09/06:

De los síntomas a los sueños: interpretación del discurso
El segundo sueño de Dora
El misterio del cuerpo femenino
Las escansiones de la verdad y las inversiones dialécticas



Hoy vamos a cerrar el caso Dora, pero antes vamos a hacer un pequeño repaso.
En primer lugar lo que vimos fueron las diferentes versiones del caso. Freud abre el caso con la versión del padre, según el cual Dora está fantaseando una historia y le pide a Freud que la quite de ella; después nos presenta la versión de Dora, que cuenta que el padre la está usando en una especie de intercambio con el Sr. K: aquél entrega su hija a cambio de que éste entregue su mujer. Y en tercer lugar tenemos la versión, esto es la interpretación de Freud.
Y a partir de allí empezamos a ver los distintos elementos teóricos y técnicos, la manera en que Freud está construyendo su teoría y al mismo tiempo desarrollando su técnica. Analizamos como va utilizando las distintas herramientas para interpretar los síntomas.
El primer resumen del caso nos lo presenta en tres conclusiones escalonadas. La primera conclusión sería que Dora ama al padre; la segunda, que ama al Sr. K; y la tercera, que ama a la Sra. K.
Las dos últimas clases se centraron sobre los sueños, porque lo que Freud deja explicado muy bien es que este es el primer caso en el que él va a poner en práctica la técnica de la interpretación de los sueños. Así como en la primera parte vimos la técnica que aplica para la interpretación de los síntomas, ahora veremos la que desarrolla para la interpretación de los sueños. ¿Y qué es lo que veremos? Que en ambos casos se trata de una misma técnica: el de la interpretación del discurso, dado que lo que interpretamos del síntoma son las asociaciones, y en el caso del sueño el relato del mismo más sus asociaciones. Técnica que ya veremos vale para cualquiera de las formaciones del inconsciente.
En el primer sueño de Dora se resume su posicionamiento subjetivo ante su deseo: ante su atracción por el Sr.K Dora lo que hace es retroceder y refugiarse en un deseo anterior, esto es, el amor al padre. Esto nos habla del posicionamiento histérico: cuando se encuentra en la realidad con que puede satisfacer su deseo, huye de ello, manteniéndolo insatisfecho.
Y lo que hoy veremos es que este segundo sueño es un paso inverso: vuelve a aparecer su deseo por el Sr. K y, yuxtapuesto con esto, el deseo de venganza contra el padre, contra el Sr. K, y también contra el propio Freud. Estas son dos de las líneas sobre las que Freud va a trabajar el segundo sueño.

El texto que vamos a ver hoy consta de tres apartados: el primer apartado es el análisis del sueño; el segundo apartado es el análisis de la última sesión, porque este sueño coincide con que Dora se despide, ; y las conclusiones finales. En esas conclusiones tenemos que leer con detenimiento los agregados que Freud hizo al texto primero, en las sucesivas reediciones, y en cada uno de los agregados veremos como hace hincapié en las cosas que le faltaron profundizar con Dora. A eso le agregaremos la revisión que hace Lacan.

El título de este caso es “Análisis fragmentario de una histeria”. Estamos intentando ver como Freud crea su método y como intenta hacer inteligible una teoría psicológica de la histeria. Por eso estamos centrándonos en la histeria, porque es el material primero que Freud utiliza para construir su teoría, y su técnica y su método.
Una de las conclusiones finales que Freud saca con respecto al deseo de Dora, está también presente en Isabel de R, quien ante la posibilidad de que se concrete su anhelo al morir su hermana, huye de su cuñado refugiándose en la enfermedad. Freud está construyendo así su teoría de la estrategia histérica ante el deseo.

Veamos el texto del segundo sueño de Dora. Lo primero que Freud dice es, su primer nivel de análisis es: que lo que vemos en este texto es del orden del deseo de venganza contra el padre. Nos cuenta además que en esos días Dora se estaba preguntando en relación a la escena del lago. El análisis del sueño lo va a hacer siguiendo la técnica que vimos en el primer sueño, es decir, dividir el texto en elementos significantes, frases o palabras. Fragmento por fragmento, Freud lo que hace es plantear a la paciente que asocie lo que se le ocurre. Generalmente lo primero que aparece es que ciertas palabras de esos fragmentos remiten a palabras dichas el día anterior o muy recientemente, es lo que Freud llama restos diurnos. Estos motivos diurnos sirven para fijar lo que sería el primer nivel del contenido latente. Llamamos contenido manifiesto al texto con el que se relata el sueño y llamamos contenido latente aquella reconstrucción que el analista hace a partir de las asociaciones que el analizante trae. De ahí la pericia de cómo algunos elementos del discurso son privilegiados sobre otros
Por ejemplo, en este texto va a privilegiar los elementos ambiguos, es decir aquellos significantes que remiten a varias significaciones. En este sueño va a subrayar la importancia de los números, como los números son elementos de enganche entre el contenido manifiesto y el latente. Veremos como se enganchan los números con el material productor del sueño
El primer elemento “Voy caminando por plazas…” Dora lo asocia con unas fotos, unas postales que estuvo viendo el día anterior de un álbum que le había regalado un joven ingeniero con el cual hay una supuesta expectativa amorosa, este joven estaría esperando terminar su carrera en Alemania para después pedir su mano.
Sobre este primer elemento vemos como trabaja la sobredeterminación, pues además de las postales antedichas surgen como elementos asociados la visita de un primito a quién debió mostrar Viena, y su visita al Museo de Dresde con la contemplación de la Madonna de Rafael.
Otro elemento “¿Dónde está la estación?”le recuerda que el día anterior le preguntó a su madre dónde estaba la caja con el álbum, y también dónde estaba la llave del cognac
Estos son ejemplos de cómo funciona el mecanismo de elaboración onírica. No es ninguna cosa rebuscada, simplemente utiliza los mismos elementos referidos a distintas situaciones: la caja por la estación. La caja en alemán es un término que además de la significación común remite a una acepción referido a la mujer.
Aquí tenemos en acción el mecanismo que Freud todo el tiempo está resaltando, y es que el mecanismo de elaboración del sueño se vale de la polisemia. Lo que él va a analizar como fantasías sexuales de Dora, como contenido latente, se cuelan en el contenido manifiesto a través de las distintas significaciones de los términos. Estación nos remite a caja, y caja nos remite – en alemán- a una mujer de dudosa moralidad.
Además de este mecanismo de asociación que se apoya en la polisemia, es decir, en los varios significados transportados por un mismo significante, hay otra variante del mecanismo de elaboración onírica que se vale de asociaciones de significante. Uno asocia un término con otro término no por el sentido sino por el sonido, por sonido común, porque parte de los fonemas son comunes.
De este mismo elemento Freud extrae otro ejemplo de transporte de sentido apoyándose en el simbolismo: “¿dónde está la cajita?...¿dónde está la llave?” son interpretadas como preguntas por los genitales. Recordemos que el pobre papá enfermo alejado de la Sra.K tiene dificultades con el dormir y Dora tiene que proveerle…de cognac.
Dentro de lo que es el material de las fantasías de Dora Freud subraya su curiosidad sexual.
Otro elemento es “la carta….la muerte del padre” Esto remite a la carta de despedida que Dora escribió en su momento con una velada amenaza a su propia muerte. Freud verá aquí lo que llama la fachada del sueño que se correspondería a una fantasía de venganza contra el padre.
El fragmento ¿…si tu quieres? lo enlaza Dora con la carta de la Sra.K invitándola al lago. Aquí surge entonces en el sueño el tema de la escena del lago sobre el que Freud está expectante intentando arribar a la explicación de porqué se había ofendido tanto por el cortejo del Sr.K. Entonces Dora le revela qué fue lo que le dijo exactamente el Sr.K en aquella situación: “Mi mujer no es nada para mi”. Ya veremos la trascendencia de estas palabras.
La frase “…un bosque…dos horas y media” esta también sobredeterminada: por un lado recuerda al bosque denso de la escena del lago; por otro lado remite a un resto diurno: la imagen de un cuadro de un bosque con ninfas.
Freud se detendrá en el término “ninfas”. Su sentido es polisémico: además de personajes mitológicos, la palabra es usada vulgarmente para referirse peyorativamente a una mujer; y también como término científico designa los labios menores de la vulva.
Freud deduce que este conocimiento sólo puede provenir de la consulta a un manual de anatomia, reveladora de la curiosidad sexual de Dora. Y en esta línea Freud va a unir tres elementos: Friedhof (cementerio) > Bahnhof (estación )> Vorhof (vestíbulo) y este último es usado también como término anatómico de los genitales femeninos.
Freud construye así con el vestíbulo, las ninfas y el bosque denso una geografía sexual simbólica, objeto de curiosidad de la joven, que remiten a lo que podemos denominar el misterio del cuerpo femenino y a una fantasía de ser poseída sexualmente.
Aparece un fragmento olvidado del sueño: “leo tranquila un gran libro”. Aquí Freud nos muestra dos interesantes observaciones técnicas: en primer lugar, que los fragmentos oníricos que son recordados a posteriori son siempre los más importantes para la comprensión del sueño; y en segundo lugar, que los elementos de la frase que privilegia son los que califican y particularizan la acción principal, en este caso “tranquila” y “gran”.
Dora asocia con la consulta de una enciclopedia sobre la apendicitis de un primo; que remite a una supuesta apendicitis suya nueve meses después de la escena del lago que aún la hacía subir las escaleras con dificultad.
Freud le interpreta que si nueve meses después de la escena del lago pasó por esos dolores – como un parto – y hasta el día de hoy soporta las consecuencias del mal paso, ello probaría su deseo sexual por K.
Y con respecto a ese recalcar que lee “tranquilamente”, se trata de su transformación en lo contrario, es decir, que estaba leyendo algo que la intranquilizaba.

A los pocos días de la interpretación de este sueño, viene Dora anunciando que esta es su última sesión, pues hace 15 días tomó la decisión de abandonar el tratamiento.
Y aquí surge en Dora el recuerdo de una institutriz de la familia K que también había sido cotejada por el Sr.K y que se despidió con un preaviso de 15 días. Además, también a esa muchacha su pretendiente le había asegurado que su mujer no era nada para él.
Aquí se le aclara a Freud el motivo de la reacción desairada de Dora al abofetear al Sr.K: por orgullo, amor propio y por celos, al verse tratada como la sirvienta.
También se deduce una interpretación con dicha muchacha, pues también se despide de Freud con una espera de 15 días. Además, aguardo 15 días para notificar la escena a sus padres, para ver si en ese plazo él renovaba su cortejo.

Veamos como describe Lacan en “Intervención sobre la Transferencia” el posicionamiento subjetivo de Dora, bajo la forma de tres escansiones en que se transmuta para el sujeto la verdad:

1ª ESCANCIÓN:
- desarrollo de la verdad: “mi padre y la Sra.K son amantes y yo quedo entregada a K”
- inversión dialéctica: reconocer la parte que le toca en el desorden del que se queja.

2ª ESCANCIÓN:
- desarrollo de la verdad: el romance del padre con la Sra K. fue posible gracias a la
complicidad de Dora.
- inversión dialéctica: los celos por el padre enmascaran el interés de Dora por la Sra.K

3ª ESCANCIÓN:
- desarrollo de la verdad: la atracción fascinada de Dora hacia la Sra. K
- inversión dialéctica: el verdadero interés que la Sra.K tiene para Dora es ser el objeto
del deseo de los hombres.

Esta es para Lacan la inversión dialéctica que le faltó propiciar a Freud: que el valor real del objeto “Sra.K” remite al misterio de la feminidad.
La pregunta histérica gira en torno a ¿qué es ser una mujer? ¿el brillo de la mujer en qué reside? La Sra.K es la metáfora en la que Dora intenta encontrar respuesta a esa pregunta.
De allí sus estrategias identificatorias: se identifica con el Sr.K para gozar de la Sra.K desde el punto de vista de un hombre, para saber que ven los hombres en esa mujer.
Y simultáneamente se identifica con la Sra.K para recibir el amor de su padre por su intermedio.
En esto se apoya Lacan para dar su interpretación de la bofetada y huida de Dora: con la frase “Ud. sabe que mi mujer no es nada para mi…” la deja a Dora sin el soporte de su identificación femenina, es como si le sacaran el piso debajo de sus pies.

Freud cinco años después se pregunta que le faltó interpretar: le faltó interpretar que el primer sueño era un aviso, que así como huía de esa casa ante la posibilidad de que se concretara su deseo, iba a huir del tratamiento si Freud la enfrentaba a esa posibilidad.
No supo ver que Dora se vengaría de su analista como se vengó de su amado.
El tema de la transferencia es crucial en este caso. La transferencia entorpece el análisis cuando su registro se produce en el nivel imaginario, que precipita la actuación en lugar de hablar de lo que pasa. En la medida que no se habla se convierte en una resistencia, no habla, o en un acto, la paciente huye.
Pero son también los prejuicios de Freud deseando el bien de Dora los que obstaculizan el tratamiento: es como si Freud estuviera identificado con el Sr.K, intentando convencer a Dora de las virtudes de esa relación para alejarla, por un lado, de la fijación incestuosa del amor al padre, pero también, del riesgo del lazo homosexual a la Sra.K.

No se puede querer el bien de su paciente, lo que hay que buscar no es el bien, sino la verdad. En la teoría Freud lo instala como asumir el complejo de castración, asumir que uno tiene, limitaciones, aceptar que uno no puede tenerlo todo, asumir la falta. La postura del análisis es exactamente lo opuesto a prometer la felicidad, el bien, la salud; simplemente ayudarle a encontrar su verdad, esto es, su deseo inconsciente.

Quien se acerca al análisis? Los que se hacen preguntas. En general el posicionamiento de los individuos es la certeza, el no interrogarse, esto es lo común, la felicidad del tontito. Los que se interrogan son esa parte de los neuróticos que han pasado por la castración, es decir, han construido una estructura en donde saben que no son completos, por eso es que se interrogan. Hay una cantidad de gente que no ha pasado por la castración, por eso es que no se interrogan. Y cuando su certeza demuestra ser falsa, porque en torno al deseo no hay certeza que valga, cuando esto les pasa factura, a lo sumo lo que buscan es alguien que les ponga una escayola, y les de una nueva certeza.
El neurótico puede hacerse preguntas, a diferencia de esa gran mayoría de zombis que no se cuestionan, que se creen en la certeza.



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